En la columna hoy vamos a mostrar algunas costumbres, tradiciones y supersticiones que nos hacen pueblo. Mientras escribo escucho un bebe que tiene hipo voy a buscar un hilo o una pestaña para ponerla en la frente del bebe con saliva para que le cure el malestar. Y si usted es el que tiene hipo va a verter agua en un vaso y beberle por el lado contrario al que agarro el vaso para quitarle su malestar.
Cuando nacía un bebe había que regalarle una manito de azabache (era una especie de puñito negro) para contrarrestar el mal de ojo y vestirlos de amarillo para que salieran del hospital ya que eso daba buena suerte.
Si tengo una mala suerte agarro la sal y tiro un poco por encima del hombro para ahuyentar. Esta si se que viene de la foto de la ultima cena (que en todas las casas de nuestras abuelitas había una) es la foto donde Jesus le dice a sus 12 apóstoles que alguien lo va a traicionar. Dicen que si usted observa bien vera que frente a Judas esta la sal derramada.
¿Quien recuerda los lutos? Esto decía que cuando alguien moría no se podía escuchar música, ni realizar actividades hasta que pasaran 9 días y había que usar ropa negra como señal de duelo.
Si te barren los pies te vas a quedar jamona (soltera). Si una persona soltera le servia café a otra persona soltera, mas valía que esta agarrara la taza con todo y platillo porque si dejaba el platito en la mano de quien lo ofrecía, esa se quedaría para vestir santos. Gracias a Dios que para todo hay una solución y allí estaba San Antonio puesto de cabeza para que consiguiera una pareja de inmediato.
Cuando la visita estaba quedando mucho tiempo se buscaba la escoba se ponía la escoba al revés detrás de la puerta, se le ponía un trapo por encima y se le daban par de correazos mandandola "a misa". Ni se te ocurra abrir una sombrilla dentro de una casa porque eso trae mala suerte.
Escuchar las gallinas haciendo ruido en el gallinero sin razón alguna u oír las palomas cantando era presagio de muerte. Entonces era el momento de buscar si había una mariposa dentro del hogar porque pronto habría un luto.
Si se trataba de lluvia usted tenia que coger dos alfileres y ponerlos en forma de cruz para que escampara; pero si deseaba que no lloviera era tan sencillo como coger un vaso de agua y ponerle un platito y virarlo boca abajo sin derramar una gotita de agua... de seguro que salía el sol.
Podríamos seguir hablando de supersticiones que si los gatos, que si las escaleras, que si los espejos y otras cosas mas; pero como DESDE MI PESEBRE es un conversatorio matutino lo dejamos para un segundo articulo sobre las supersticiones. No crean que yo creo en estas tonterías; pero por si acaso antes de despedirme voy a golpear 3 veces madera para que no se me pegue ninguna.
Como siempre digo el que tenga oídos que oiga... y nos vemos mañana DESDE MI PESEBRE.
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