Buenos días mi gente otro día mas desde mi pesebre… Hoy me
encuentro en un lugar de mi pueblo… no donde nací; pero si donde me crie, me
forme como ser humano y mi primera educación nace. Cosas y cass o como dice uno de mis
estudiantes “Causalidades no casualidades” y yo le llamo juegos que te da la
vida.
Mi papá es de Ponce, mi mamá es de Corozal y como antes he
hablado el plan de Dios es uno que no juega a nuestro tiempo y no usa nuestras reglas. Mis padres se conocieron en Estados
Unidos. Pues soy otro de los miles de
boricuas que nacen en los Estados Unidos bajo el gran sueño dorado de buscar
fortuna. Mi papá comienza a enfermarse
con el asma y decide regresar a Puerto Rico.
Es allí que conozco a Yauco y
comenzare a contarles cosas de mi pueblo.
Mi pueblo es diferente ya que rompe los esquemas de los
españoles de plaza, alcaldía e iglesia.
Incluso tiene dos plazas principales.
El pueblo esta construido a la falda de una montaña lo que hace que el
pueblo se vea como un gran árbol de navidad desde el expreso.
Cuentan que el primer día de madres se celebro en Yauco, que
es el único pueblo bisiesto en la isla,
que el café era tomado por el Papa en el vaticano en Roma, ¿Quién no ha
escuchado “El villancico Yaucano”?, Las chuletas “Can-Can” de la guardarraya,
los tostones del lago de Lucchetti, la herencia de los Corsos, el primer auto
que llego a Puerto Rico estaba en Yauco, las escalinatas, la cuesta blanca, el
puente colorao, la ermita de Barinas, la casa del cacique Agueybana, la tierra
fértil del valle de Barinas, la caña de azúcar y otras cosas mas que distinguen
al pueblo.
Pues ayer viene a mi pueblo y decidí recortarme ¿WOW saben
cuanto me cobraron? La gran suma de $5.00 dólares (En el área metro eso seria
la propina). No podía creer que aun
hubiese barberos que cobrasen eso. Después me fui a negocio de un amigo a darme
par de frías (cervecitas) y me doy con la sorpresa que sacan un caldero y hacen
viandas y carne frita gratis para los que estaban allí.
En el articulo hoy no quiero escribir sobre mi pueblo; pero
si quiero pedirte que cuando puedas regreses a tus raíces, a buscar viejos
amigos, a recordar viejas memorias y a hacer patria en tu país. Dicen que el que no recuerda la historia
tiene la posibilidad de volver a cometer los mismos errores que en el
pasado. Mientras me tomo una taza de
café negro sentado en mi pesebre te pido… El que tenga oídos que oiga y nos
vemos mañana desde mi pesebre.
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