Desde mi pesebre "Gane porque perdí"

Buenos días mi gente... otro día mas desde mi pesebre.  No se si notaron; pero me quede sin internet par de días y aunque siempre escribía no siempre podía subir a mi columna el articulo.  Ir a un sitio de internet publico o un sitio de comida rápida a subir lo escrito es un poco gracioso y complicado.  Después de excusarme con ustedes mis amigos cibernautas que conozco; pero que desconozco que me leen pensando en que escribir hoy dije: "¿Cuantas veces ganamos porque perdemos o viceversa?".

Para algunos de ustedes esta historia será familiar; pero para otros no sabrán de que rayos hablo... El primer caso que quiero exponerles es el famoso viaje del transbordador espacial "Challenger".  Lo que hacia este viaje memorable era que el presidente de Estados Unidos sugirió que volase una maestra como parte de la tripulación.  Como ustedes conocen la lamentable historia un 28 de enero de 1986 a 75 segundos de despegar el transbordador exploto con sus 7 tripulantes.  Ahora voy con mi explicación de porque se gana cuando se pierde o viceversa.

De un total de mas de 10,000 maestros en toda la nación se hizo un escogido de un maestro que era el que viajaría al espacio.  Todos conocen la historia de "Sharon Christa" (la maestra que exploto como parte de la tripulación; pero dicen las malas lenguas o el cuento de "grapevine" (chisme de las personas que conocen la historia) que ella no fue la persona que fue elegida.  La persona elegida se enfermo de una gripe la cual impidió que pudiese seguir con los entrenamientos para ir al espacio.  WOW pueden creerlo que se salvo porque perdió...

Ahora después de esta historia sea verídica o irreal pensemos ¿cuantas veces perdemos una oportunidad de empleo, una compra en especial, una pareja o simplemente ir a visitar a alguien?  Nunca sabremos el porque suceden las cosas o que perdimos por no aprovechar la oportunidad que paso frente a nuestras narices.  Como he dicho antes... El futuro no ha llegado por ende pensemos que será bueno.  No comencemos a lamentarnos sobre lo que debimos haber hecho o lo que dejamos pasar... enfoquemos nuestros pensamientos en que vamos a hacer el día de hoy y como lo vamos a hacer memorable.

El que tenga oídos que oiga y nos vemos mañana desde mi pesebre.