Desde mi pesebre "¿Te amas?

Buenos días mi gente... otro día mas DESDE MI PESEBRE.  Ayer comenzó un semestre universitario en una de las instituciones educativas de la isla; en donde soy conferenciante.  Puedo decir que esto hace que uno sienta la misma sensación de incertidumbre y alegría que tienen mis estudiantes.  Volver a ese aula que te ayudo a desarrollarte como profesional se siente bien; pero llegas a buscar si en realidad ¿te amas?

Todo aquel que ha tenido el honor de ser educador puede entender completamente el sentimiento que trato de explicar en nuestro escrito.  Si no existieran las deudas económicas este seria el trabajo ideal ya que tienes la oportunidad de transformar a un joven (no en edad) que desea desarrollar sus conocimientos.  Y eres tu esa persona que irá a impartir conocimiento, experiencias y mostrar ese amor que tienes por tu carrera.  Entonces como decía un sacerdote y yo en la columna de la esponja hace varias semanas... no puedes dar lo que no tienes.  Si no tienes amor por algo no puedes dar amor.

Llegue a mi salón de clases y estaba vacío... que decepción.  Esperar casi cuatro meses para que el día ansiado llegue y ningún estudiante este en el mismo.  WOW pasan mil cosas por tu mente... dices: "¿En realidad estoy en el lugar que debo estar?".  Preparas la clase, los planes, dinámicas y llegas al salón y estas solo... De repente aparece la pregunta ¿Te amas?

Esperas, esperas, esperas y te desesperas... sales fuera del salon y otros profesores te indican que el primer día siempre sucede.  Tu que simplemente eres un conferenciante... buscas una explicación de ¿por que sucede esto?  Llega el costo de gasolina, la perdida de tiempo, el viaje y haces un estudio en ¿donde haz fallado?  ¡Un salón vacío!... y hay varios estudiantes que repiten clases contigo.  Decepción total... ¿Te amas?

Abandono el salón después de 30 minutos esperando que llegue alguno de mis alumnos; pero no sucede.  Me siento en un banco a mirar los estudiantes pasar y me pongo a ojear un catalogo de clases... jajajajajajajaja no falle yo; fue la secretaria que confundió el día de la clase.  Ella entendió que la letra M significaba miércoles y se le escapo que se refería a "monday".   En las miles de tareas que tiene diaria hizo la confusión de enviar información incorrecta, ¿me afecto? sí; pero yo me amo y no le doy a nadie el permiso para amarme mas de lo que debo hacerlo yo...

Eres tu... el que tiene que amarse.  Nada, ni nadie puede controlar tu mundo...  decía Santa Teresa de Avila: "Nada te turbe, nada te espante todo se pasa, Dios no se muda, la paciencia todo lo alcanza, quien a Dios tiene nada le falta sólo Dios basta".  Entonces esta oración se puede convertir en un aliciente diario...  ¿que puedes perder?  NADA; porque tu te amas.

Para terminar la columna de hoy... AMATE; ama a esa persona que esta contigo 24 horas.  Dale amor y no permitas que nadie te quite lo que es tuyo... El amor es el sentimiento mas grande que tiene el ser humano.  Si repetir la oración de Santa Teresa de Avila te da ese amor entonces repite la oración en todo momento. La conclusión de este conservatorio es que te ames... Como siempre digo el que tenga oído que oiga... y nos vemos mañana DESDE MI PESEBRE.