Buenos días mi gente; otro día mas DESDE MI PESEBRE. Hoy quise retomar algo que tenia en pausa... el paseo en bicicleta por Viejo San Juan. Entonces tome mi cafe negro a la carrera y salí dispuesto a correr bicicleta después de dos semanas de descanso por cuestiones de salud. Nada parece que ahora que estoy tratando de ejercitarme el cuerpo decidió botar sus toxinas y esto produce que me enferme mas que antes; en lo que mi cuerpo se acostumbra. Entonces hoy decidí pensar, reaccionar y decidí ponerme de pie.
Todos saben el cuento del naufrago que al caer al agua tomo la decisión de nadar para salvarse. Entonces sin pensarlo dos veces comenzó a nadar... al pasar un rato las preguntas comenzaron a golpear su mente. ¿Estaré en el camino correcto hacia la orilla?, ¿Me cansare antes de llegar?, ¿Me estoy alejando de tierra y entrando al mar abierto?, ¿Debí quedarme en la embarcación que se hundía?... así siguió nadando, nadando y nadando. En un momento la ola subió y pudo ver una isla... entonces se motivo y comenzó a nadar mas rápido. Lo único que se empeño en solo llegar nadando y murió ahogado en 3 pies de agua... todo porque hay veces que no se cuando ponerme de pie.
Entonces ¿por que? cuando estamos en un sitio que no nos agrada permanecemos allí... ¿a quien tenemos que complacer? es necesario humillarnos y soportar algo que nos hace sentir incomodos. ¿Será el respeto? o tal vez es el miedo a que los demás comenten. Si nosotros somos lo mas importante que tenemos en esta vida... creo que es el momento que de vez en cuando en vez de soportar algo que nos incomoda es tiempo de ponerme de pie.
La humildad es saber cuando doblar rodillas; pero esto no implica que debemos estar de este modo todo el tiempo. Lo único que debemos de hacer después de pedir fuerzas al divino creador es comenzar a caminar; pero tenemos que recordar es que para caminar debemos dejar las cosas a un lado y hacer toda la fuerza necesaria para impulsar el cuerpo hacia arriba y para terminar o comenzar a caminar lo recomendable es ponerme de pie.
Todos en un momento hemos sido el apoyo de alguien a quien apreciamos. Sé que mis lectores son personas que de vez en cuando han ejercido la fuerza necesaria para ayudar al que lo necesita. Todos somos parte de este mundo y queremos poner siempre el grano de arena necesario para mejorar este sitio que llamamos mundo. Entonces tenemos que buscar que esta mal y cambiarlo a bien... o tal vez eso que esta bien mejorarlo... esto es parte de ponerme de pie.
La unica forma de disfrutar las cosas desde nuestra altura es estirando nuestras extremidades... si estas en una cama, en una silla de ruedas o en tu trabajo estira tus brazos lo mas que puedas... coloca tus brazos alrededor de esa persona mas importante en tu vida... TU y abrazate. Entonces hoy es un buen dia para comenzar con el cambio que necesitamos... es momento de ponerme de pie.
Agradezco a todos los que el otro día terminaron DESDE MI PESEBRE... con su historia. Esto para mi es fortaleza y alegría porque ustedes entienden que son parte de la columna... tal vez no nos conocemos o nunca tengamos el placer de vernos; pero ustedes han compartido conmigo algo que pocos conocen... el día que decidí ponerme de pie.
Como siempre digo el que tenga oídos que oiga; nos vemos mañana DESDE MI PESEBRE.
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