Todo el día era esta lucha interna de ir o no... incluso no entre a las Redes Sociales para no ver las personas que se tomaban fotos cons sus respectivas madres. Tal vez sí soy un histórico y haber ido a visitar a mi madre era lo que debía haber hecho. Es tarde en la noche y aun pensaba si había tomado la decisión correcta, fue en ese momento que recordé un cuento llamado:
Querer o amar
Erase una vez un hijo que se acerco a su madre y le pregunto ¿cómo saber la diferencia entre querer y amar? La madre con su sabiduría le dijo: Ves aquella flor que esta al lado del camino, pues imagina que no tienes regalo para mí. ¿La arrancarías y me la darías? El hijo sin pensarlo le dijo: ¡Claro mamá!
Hijo al arrancarla seria bella y la aceptaría con mucho cariño; sin embargo por más que la ponga en agua ella moriría y solo seria algo de un momento, eso es querer. No pensar en las consecuencias futuras y hacer las cosas por impulso.
Por otro lado si la dejaras allí, le echaras agua y le tomaras una foto... podría verla, observarla, hablarle y escucharle hasta que Dios decida que ella muera o se multiplique. Amar es tomar todas las medidas por tratar de cuidar, proteger y velar para poder disfrutarla mas tiempo.
Fue así que comprendí que me alegro por todos los que pudieron ver a su madre y compartir con ella. Yo decidí pensar que había tomado la decisión correcta porque amé. Como en todos mis DESDE MI PESEBRE no estoy juzgando lo que cada cual hizo; solo comparto otro escrito. Como siempre digo el que tenga oídos que oiga y nos vemos mañana en DESDE MI PESEBRE.